Qué ver en Ecuador

Baños

Desde Quito a través de la ruta de los volcanes, desde Guayaquil siguiendo la ruta de las estrellas y desde el Amazonas por la ruta de las cascadas, guayabas y orquídeas se llega a Baños de Agua Santa. Esta pequeña ciudad ubicada en el centro del país, a 1820 msnm en las faldas del volcán Tungurahua o “Garganta del infierno” en la provincia homónima, está considerada como la puerta de entrada a la Amazonía ecuatoriana. Está rodeada de una vegetación exuberante repleta de aguas termales, cascadas, ríos, montañas y un volcán activo, razones suficientes para ser uno de los destinos más completos y aclamados por los turistas tanto de aventura como de descanso y diversión en Ecuador.

Los puntos más interesantes de la ciudad son la Basílica de Nuestra Señora de Agua Santa, en cuyo interior hay una interesante colección de murales que describen los milagros locales atribuidos a la Virgen y un imponente altar cubierto de pan de oro, el Museo de la Basílica de Agua Santa ubicado en el Convento de los Padres Dominicos, el edificio de la municipalidad con su Torre del reloj frente al Parque Palomino Flores y el animado mercado. Ofrece una gran variedad gastronómica en sus más de 80 restaurantes, muchos de ellos internacionales y un festivo ambiente nocturno.

Los protagonistas naturales de Baños son el serpenteante río Pastaza con su cañón y el cráter del activo volcán Tungurahua con su cumbre eternamente nevada. Siguiendo el curso del río se puede seguir la "ruta de las Cascadas", un circuito de unos 20 km que se puede realizar en bicicleta o kart y que es todo un clásico. El camino muestra el fantástico marco natural de la densa vegetación y las altas montañas. En la propia ciudad se encuentra la cascada Cabellera de la Virgen que nace en el cerro de Bellavista. Después, siguiendo la ruta, la primera que aparece es la cascada de Agoyán, una de las más altas de Los Andes ecuatorianos. Más adelante la cascada Puerta del Cielo y más allá la cascada Manto de la Novia, en donde se puede montar en una cesta metálica parecida a un teleférico llamada “tarabita” para cruzar el río y sentir el vértigo, apreciar mejor la caída de 40 metros y el paisaje. Siguiendo la ruta te topas con las cascadas San Jorge y San Pedro y no muy lejos de allí está el famoso Pailón del Diablo en río Verde, uno de los saltos más impresionantes del planeta, cuyo nombre se debe a su forma parecida a una paila y desde lejos, a la cara del diablo. Al llegar aquí es interesante bajar un kilómetro a pie para llegar a los miradores y observar el ambiente único y mágico de la cascada que tiene una altura de 100 metros. Para completar el circuito, se pueden recorrer unos 3 kilómetros más en dirección a Puyo hasta las cascadas de Machay y disfrutar de un baño refrescante en las piscinas de la cascada del Rocío.

Los balnearios o piscinas naturales de aguas termales de Baños son conocidas a nivel nacional e internacional por sus propiedades medicinales que reconfortan el cuerpo y el estado de ánimo. Ubicadas en el centro de la ciudad están las Termas de la Virgen a los pies de la cascada “Cabellera de la Virgen” y el Balneario de Santa Clara. El Balneario Las Peñas tiene piscinas con toboganes como en un parque acuático. Las Termas El Salado, junto al río Bascún, cuentan con 5 piscinas de agua caliente que llegan hasta los 54 grados y otras 2 de agua fría.

Las actividades deportivas al aire libre que pueden practicarse en este entorno privilegiado son infinitas, incluidas las de alto riesgo para descargar adrenalina. La oferta es amplia: rafting, canopy, kayak, canyoing, puenting, zip-lining, escalada, downhill, senderismo, montañismo, tours en bicicleta, cabalgatas, caminatas y parapente.

Mención especial merece la Casa del Árbol, famosa por el llamado “columpio del fin del mundo”. A pocos kilómetros de Baños se encuentra este lugar tan aclamado por los turistas que visitan la ciudad. Fue construida originalmente para disfrutar de unas buenas vistas de la selva y el volcán Tungurahua a una distancia segura y para volar sobre el abismo mientras te columpias en su mítico asiento al borde del precipicio.

Baños presume de cascadas, arcos iris, manantiales de aguas termales, nubes fugaces, volcanes de fuego y nieve, senderos ecológicos, orquídeas silvestres, coloridas mariposas y ríos límpidos. Baños rebosa naturaleza, verde, belleza y tranquilidad.