Un viaje a Rumanía constituye un viaje al pasado, una odisea a los tiempos de la Edad Media. Cuando se visitan los pintorescos pueblos de la región de Transilvania, cuna de la leyenda y mito del conde Drácula, el espíritu se ve sobrecogido por la fuerza de la historia de un pasado que se hace presente.
Los famosos monasterios con pinturas al fresco, gloria y orgullo del patrimonio rumano, son el mejor ejemplo. Pero los viajes a Rumanía no son solo historia, pasado o leyenda, sino que son, además, sinónimo de museos, de exquisita arquitectura, de majestuosas iglesias, de ancestrales tradiciones, de preciosas playas en la Riviera Rumana, de célebres balnearios donde reposar el cuerpo, las ideas y el espíritu, y de paraísos naturales como el de la zona del Delta del Danubio.
En medio de Europa Central, Oriental y Europa del sur, Rumanía es famosa por su región boscosa de Transilvania, inmortalizada en mitos y leyendas y conocida por su fantástico paisaje de colinas, montañas y vastas llanuras. Rodeada por el Mar Negro, Bulgaria, Hungría, Moldavia y Serbia, el país de Rumanía ofrece a los viajeros una amplia gama de actividades y lugares de interés, gracias a su gran tamaño y variedad geográfica.
Los balnearios del Mar Negro, como Mamaia y el bohemio Vama Veche, dan la bienvenida a los turistas en verano, que disfrutan de las tranquilas playas y nadan en el mar interior. Las laderas de las montañas de los Cárpatos, que atraviesan el centro del país, albergan varias estaciones de esquí populares, la más famosa de las cuales es la Poiana Brasov, cerca de la ciudad de Brasov. Para los viajeros en un viaje a Rumanía que prefieren empaparse de la cultura y la historia del país, las ciudades y pueblos medievales bien conservados de la Transilvania mítica, como Sibiu, Bistrita y Brasov, albergan una amplia colección de edificios históricos y monumentos como el mundialmente famoso Castillo de Bran, conocido como 'Castillo de Drácula', ya que el castillo de la cima de la colina comparte muchas similitudes estéticas con el castillo del Conde Drácula, como se describe en la novela icónica de Bram Stokers.
La capital rumana, Bucarest, en el sur del país, es la ciudad más grande y el centro cultural, político y financiero. Se encuentra a orillas del río Dambovita y alberga el Palacio del Parlamento de la era comunista. Muchos viajes organizados en Rumanía comienzan en la capital, ya que es el lugar perfecto para experimentar la cara moderna del país antes de explorar las partes más rurales y antiguas.
Historia de Rumanía
Rumanía es una tierra de gran importancia histórica; es aquí donde se encontraron los restos más antiguos conocidos de Homo Sapien en Europa, que datan de hace 40.000 años y se excavaron en una cueva en el suroeste del país. Hubo asentamientos en el territorio de la actual Rumanía desde los tiempos neolíticos, y el país ha sufrido una larga historia de ocupación y asentamiento a lo largo de los siglos, como la de los imperios romano y turco.
Un viaje a Rumanía ofrece a los viajeros la oportunidad de sumergirse en la historia antigua del país visitando sitios como las ruinas romanas que se encuentran en la ciudad de Alba Iulia, en el oeste del país. Rumanía se independizó de Turquía en 1877 y posteriormente fue declarado el Reino de Rumanía bajo el rey Carol I en 1881. El siglo XX fue un desafío para el país ya que, aunque se unió a las Fuerzas Aliadas en la Primera Guerra Mundial, el país sufrió una gran pérdida de territorio y la persecución, particularmente de su población judía en la primera mitad del siglo.
Después de la Segunda Guerra Mundial, hubo una toma de poder por parte de los comunistas rusos de Rumanía que duró hasta su repentino colapso en 1989, después de años de dominación de mano dura y pobreza general y represión de las masas. Hoy en día, Rumanía es un destino turístico cada vez más popular que ha ayudado a impulsar la economía. En 2007, la nación se unió a la Unión Europea y el país se volvió de fácil acceso para más viajeros, atraídos por los impresionantes paisajes y numerosos lugares de interés histórico.
Monumentos en Rumanía
Rumanía se enorgullece de ser sede de una serie de sitios del Patrimonio Mundial de la UNESCO. Las ocho iglesias pintadas de Moldavia, católicas romanas, son un impresionante ejemplo del singular patrimonio religioso y artístico del país, mientras que las iglesias de madera de Maramures, ubicadas en un bello entorno natural, muestran el ingenio arquitectónico del país.
Las iglesias y aldeas fortificadas de Transilvania evocan el misticismo y el sentimiento del viejo mundo por el que Rumanía es famosa, mientras que el centro histórico de Sighisoara encanta a los visitantes con sus coloridas fachadas y sus calles empedradas. Los amantes del arte y la arquitectura disfrutarán del Monasterio Horezu en Valaquia, famoso por su pureza arquitectónica, construido en un estilo Brancovan y famoso como una escuela de pintura mural en el siglo XVIII. Un recorrido por Rumanía es una manera fantástica de descubrir una variedad única y amplia de monumentos y edificios que muestran el verdadero carácter del país.
Naturaleza
Rumanía tiene una rica herencia artística de escritores y poetas, como Mihai Eminescu, compositores, como George Enescu y pintores. El Museo Nacional de Arte de Rumanía, en Bucarest, muestra algunas de las obras maestras de artistas nativos. El país también es conocido por ser uno de los productores de vino más grandes del mundo, con un patrimonio de viticultura que se remonta a más de 6.000 años.
Un tour por un viñedo en una de las varias regiones productoras de vino, como Dobrogea y Moldavia, es una actividad ineludible durante un viaje a Rumanía. Además de abundantes viñedos, el país tiene una abundancia de tierras sin cultivar; alrededor del 27% del territorio del país está cubierto por áreas silvestres y bosques no perturbados, donde viven animales salvajes como osos pardos y lobos.
Hay 13 parques nacionales increíbles y 3 reservas de biosfera en Rumanía, que garantizan la preservación del maravilloso entorno natural, como Călimani, hogar de lince y gatos monteses y el Delta del Danubio, un paraíso para los observadores de aves.
Cultura rumana
Rumanía es un país diverso, con una rica mezcla cultural de tradiciones y una población que abarca desde la etnia rumana hasta los magiares, los romaníes y los alemanes transilvanos y una fuerte influencia serbia, rusa, ucraniana y turca, particularmente alrededor de las zonas costeras del Mar Negro.
El folclore y la vestimenta tradicionales se celebran en las numerosas festividades religiosas y culturales a lo largo del año, como el Festival de Bucarest del Viejo, que revive el patrimonio antiguo de las capitales, y el Festival de Artes Medievales y Artesanía de Sighisoara.
Un paquete de vacaciones a Rumanía es un viaje a través de las culturas y una aventura a por una larga y fascinante historia. La arquitectura artística y las vistas únicas del país lo convierten en la elección perfecta para una excursión, mientras que su geografía diversa da la bienvenida a esquiadores, excursionistas y amantes de la playa gracias a su mezcla de montañas, bosques y playas.
